¿Dónde,
por qué y cómo se propaga el alzhéimer por el cerebro? Estas tres
cuestiones ya parecen tener una respuesta. Un equipo de
investigadores de la Universidad
de Columbia,
en Estados Unidos, ha utilizado imágenes de alta resolución de
resonancia magnética funcional (fMRI ) en pacientes con enfermedad
de Alzheimer y en modelos de ratón de la enfermedad, para determinar
estas tres cuestiones fundamentales acerca de la enfermedad de
Alzheimer. La información que han obtenido, además de avanzar en la
comprensión del alzhéimer, podría mejorar la detección temprana
de la enfermedad y mejorar la efectividad de los medicamentos. El
estudio ha sido publicado en «Nature
Neuroscience».
«Desde hace años
sabemos que la enfermedad se inicia en una región del cerebro
conocida como la corteza entorrinal», explica Scott A. Small,
director del estudio. «Pero ahora este
estudio es el primero en mostrar en pacientes vivos que el alzhéimer
se inicia exactamente en la corteza entorrinal lateral o LEC.
Se considera que la LEC como una puerta de enlace para el hipocampo,
que juega un papel clave en la consolidación de la memoria a largo
plazo, entre otras funciones. Si la LEC se ve afectada, también lo
harán otros aspectos del hipocampo», explica.
El estudio muestra
asimismo que, con el tiempo, el alzhéimer se propaga desde la LEC a
otras áreas de la corteza cerebral, en particular, ala corteza
parietal, una región del cerebro que participan en varias funciones,
incluyendo la orientación espacial y la navegación . Los
investigadores sospechan que la patología se propaga
«funcionalmente»,
es decir, al actuar sobre la función de las neuronas en la LEC, que
a su vez pone en peligro la integridad de las neuronas en las áreas
adyacentes.
Pero
es que además la investigación tiene un tercer hallazgo importante.
Los investigadores han visto que se produce una disfunción en LEC
cuando coexisten cambios en la proteína
tau y la precursora amiloide (APP)
–dos proteínas relacionadas con el alzhéimer-. «La LEC es
especialmente vulnerable a la enfermedad de Alzheimer, ya que
normalmente se acumula tau, lo que a su vez sensibiliza LEC a la
acumulación de APP. Juntas, estas dos proteínas dañan las neuronas
de la LEC , preparando el escenario para la enfermedad de Alzheimer»,
explica otra de las autoras, Karen E. Duff.
Para
poder todos estos cambios en el cerebro los investigadores han
utilizado una variante de alta resolución de la resonancia magnética
funcional en 96 adultos que participaron en el Proyecto
de Envejecimiento de Washington Heights-Inwood Columbia (WHICAP).
Todos los voluntarios estaban libres de demencia en el momento de la
inscripción.
Oportunidad única
«Este estudio nos
permite seguir a un gran grupo de individuos sanos de edad avanzada,
algunos de los cuales ya han desarrollado la enfermedad -señala
Small. Además, nos ha dado una oportunidad única de visualizar y
caracterizar a los pacientes con enfermedad de Alzheimer en sus
primera etapa, la preclínica».
Los 96 adultos fueron
controlados durante un promedio de 3.5 años, momento en el cual se
identificó que 12 de ellos habían desarrollado un alzhéimer leve.
Un análisis de las imágenes de resonancia magnética funcional de
estos 12 individuos encontró una disminución significativa en el
volumen sanguíneo cerebral (CBV ) -una medida de la actividad
metabólica de la LEC- superior a la de los 84 adultos que estaban
libres de demencia.
Los expertos también
analizaron el papel de tau y la APP en la disfunción LEC . Mientras
que algunos estudios previos han sugerido que la disfunción de la
corteza entorrinal se asocia con anormalidades tanto de tau como de
APP, hasta ahora no se sabía cómo estas proteínas interactuaban
para cuasar dicha disfunción, en particular en alzhéimer
preclínico.
Alzhéimer preclínico
Para responder a esta
pregunta, explica Usman Khan, creamos tres modelos de ratones: uno
con niveles elevados de tau en la LEC; otro con niveles elevados de
APP, y el último con niveles elevados de ambas proteínas. Los
investigadores encontraron que la disfunción LEC se produjo sólo en
los ratones que tenían ambas proteínas elevadas.
La información que ha
desvelado este trabajo tiene
importantes
implicaciones para la investigación y el tratamiento.
«Ahora que hemos establecido claramente dónde empieza la enfermedad
de Alzheimer, y hemos mostrado que dichos cambios se pueden
visualizar mediante fMRI , podemos ser capaces de detectar la
enfermedad de Alzheimer en su fase preclínica temprana, cuando puede
ser más tratable y antes de que se extienda a otras regiones del
cerebro», subraya Small. Además , dicen los investigadores, el
nuevo método de imagen podría ser utilizado para evaluar la
eficacia de los fármacos prometedores contra el alzhéimer durante
estas primeras etapas de la enfermedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar nuestro blog